Fierro (Fe)
El fierro o hierro es un metal maleable, color gris plateado y magnético. Es el cuarto elemento más abundante en la corteza terrestre y no se encuentra de manera elemental por lo que debe ser extraído de compuestos minerales.
De la producción mundial de metales duros, 95% corresponde a fierro, volviéndolo el metal más usado del planeta. El fierro puro (a partir de 99.5%) no tiene demasiadas aplicaciones, salvo excepciones para aprovechar su potencial magnético. Su principal aplicación es en producciones que requieren aleaciones y que utilizan el fierro como elemento matriz para alojar otros elementos tanto metálicos como no metálicos. Un ejemplo de lo anterior: el acero, una aleación de fierro con carbono que da como resultado un material versátil y de uso muy extendido, especialmente en construcción de maquinaria, herramientas, edificios y obras públicas, aeronáutica, industria automotriz e instrumental médico.
El hierro existe en pequeñas cantidades en los seres vivos pero desempeña un papel vital en el crecimiento y en la supervivencia de los mismos, y es necesario no sólo para lograr una adecuada oxigenación de los tejidos sino también para el metabolismo de la mayor parte de las células. Según la Organización Mundial de la Salud la deficiencia de hierro se considera el primer desorden nutricional en el mundo. No obstante, cuando hay exceso de hierro, éste se acumula en el hígado, causándole daños. En el caso de una inhalación crónica de altas concentraciones de óxido de hierro se puede presentar una siderosis, y en trabajadores expuestos a carcinógenos pulmonares esto podría incrementar el riesgo de desarrollar cáncer de pulmón. Al estar en contacto con los ojos, el hierro puede ocasionar problemas como conjuntivitis, retinitis y coriorretinitis
En aguas subterráneas puede haber concentraciones de hierro de hasta varios miligramos por litro sin que se manifieste alteración alguna del color ni turbiedad al bombearla directamente desde un pozo. Sin embargo, al entrar en contacto con la atmósfera, éste se oxida y tiñe el agua de color marrón rojizo.
En su forma de arsenito férrico resulta un compuesto altamente tóxico y muy peligroso para el medio ambiente y la salud, que demanda un cuidado extremo en su uso y manejo. Por otro lado, dado que el hierro se asocia al oxígeno con facilidad, en un medio acuoso puede ocasionar deficiencia de oxígeno y, como resultado, la asfixia de algas, peces y otros organismos acuáticos.
En caso de tener altas concentraciones de fierro en el agua, comúnmente son utilizados los métodos de oxidación-filtración, intercambio iónico u ósmosis inversa para eliminar el metal del agua.