pH
El pH o potencial de hidrógeno es una medida respecto a las condiciones de acidez o alcalinidad del agua.
Se expresa en una escala que va de 0 a 14, donde 7 se considera neutro, lo que significa que el agua no es ni ácida ni alcalina, valores menores a 7 indican acidez y mayores a 7 alcalinidad (entre más bajo o más alto el valor, más ácida o alcalina es el agua).
El pH varía de manera natural conforme al tipo de rocas y vegetación de ribera en las cuencas hidrográficas, de modo que la vida acuática se encuentra adaptada para vivir en el rango de pH característico de la región.
De manera general, valores de pH entre 6.5 y 8.0 se consideran los más adecuados para el desarrollo óptimo de la mayoría de los organismos acuáticos, entre 5.0 y 6.5 u 8.0 y 9.0 puede afectar de forma negativa a algunos organismos acuáticos y menores a 5.0 o mayores a 9.0 puede ser letal para la vida acuática.
Este parámetro puede alterarse respecto a sus condiciones naturales por factores como la extracción de materiales pétreos, las descargas de aguas residuales sin tratamiento y el sobrecrecimiento de algas y plantas, quienes por medio de la fotosíntesis aumentan el pH.